

La Marea Blanca de Catalunya, com molts moviments socials arreu del món s’afegeix a la denúncia pública contra la decisió del President Trump
Tot seguit teniu el comunicat en castellà o aqui el podeu descarregar file:///C:/Users/packard%20bell/Downloads/Spanish-PHM-Statemnt-on-WHO.pdf
La pandemia COVID-19, a día 20 de abril de 2020, ha infectado a más de 2,3 millones de personas y ha causado más de 160.000 muertes en el mundo. Estos son tiempos difíciles para toda la comunidad global.
El Movimiento para la Salud de los Pueblos (PHM) denuncia rotundamente la medida adoptada por la administración Trump en los Estados Unidos de América de cancelar el financiamiento a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y hace un llamamiento a la solidaridad global para hacer frente a la pandemia del COVID-19 y sus consecuencias, y muestra su apoyo a la OMS como la principal institución sanitaria global que lidera esta lucha.
En tiempos tan difíciles, el ataque directo de la Administración Trump de EE.UU. contra la OMS, la principal autoridad sanitaria global de las Naciones Unidas, debe ser condenado. Después de semanas de amenaza, el 15 de abril, la Administración Trump anunció formalmente el cese de la financiación a la OMS. Este anuncio se produjo mientras la pandemia sigue acelerándose y el mundo necesita un organismo de coordinación global que fomente la cooperación y el intercambio de información relacionada con la notificación de casos y muertes, el desarrollo de vacunas y pruebas de anticuerpos efectivas.
La decisión del Presidente Trump de eliminar la financiación de los Estados Unidos para la OMS tendrá paralizará el trabajo de esta organización contra el virus COVID-19 globalmente. Al tratar de desviar las críticas sobre su propia respuesta inicial frente al COVID-19 que se retrasó más de un mes, Trump ha elegido una acción a costa de vidas humanas y provocar resentimiento y rabia contra los Estados Unidos de América. Como dice el ex presidente de los Estados Unidos Jimmy Carter: “Estoy angustiado por la decisión de retener la financiación de la Organización Mundial de la Salud que tanto necesita Estados Unidos, especialmente durante una pandemia internacional. La OMS es la única organización internacional capaz de liderar el esfuerzo para controlar este virus”. https://wgxa.tv/news/connect-to-congress/jimmy-carter- speaks-out-on-president-trumps-action-to-withhold-funds-from-who.
El MSP hace un llamamiento a la solidaridad global para hacer frente a la pandemia y a sus consecuencias y para apoyar a la OMS como la principal institución sanitaria mundial en esta lucha.
Esperamos que la opinión demócrata en los EE.UU., las presiones de los/las ciudadanos/as y la comunidad científica y de salud pública, fuercen a la administración Trump para que revoque su decisión de retirar la financiación de la OMS en el momento en que más se necesita.
También hacemos un llamamiento a todas las demás naciones, especialmente a los países industrializados y a las economías emergentes, para que expresen su solidaridad con la OMS y para que aumenten lo antes posible sus contribuciones y su apoyo a fin de cerrar la brecha de financiación que surgirá a causa de las acciones del gobierno de los EE.UU.
Acciones de la OMS frente a la pandemia de COVID-19:
Con respecto a la pandemia, la OMS emitió un aviso el 30 de enero en el que declaraba la epidemia de COVID-19 una “emergencia de salud pública de interés internacional”, lo que constituye el nivel de alerta más alto posible. En él, se pedía a los gobiernos que prosiguieran los esfuerzos de contención del virus y realización de pruebas. También proporcionó asesoramiento sobre la alta tasa de contagiosidad y el potencial adverso que tenía este virus. En consonancia con los protocolos internacionales, puso de relieve lo que China estaba haciendo bien y lo que tenía que hacer. En esta etapa no señaló ninguna falla en la respuesta de China.
La OMS también ha desempeñado un papel decisivo en la distribución de equipos de protección personal, ventiladores y otros suministros médicos que salvan vidas a personas en países de todo el mundo. Expertos/as en Salud Pública han señalado que la OMS ha respondido más eficazmente a esta pandemia que en las primeras etapas de la crisis del Ébola en África. La OMS así mismo, ha iniciado la labor de desarrollo de vacunas y ensayos clínicos. También ha puesto en marcha el “ensayo de solidaridad”, un ensayo clínico internacional para ayudar a encontrar un tratamiento eficaz para COVID-19. También ha elaborado un curso multilingüe en línea en 13 países sobre COVID-19 con 1,2 millones de inscritos (http://openwho.org).
La retórica y la acción contra las Naciones Unidas en el marco de la Administración Trump
El debilitamiento sistemático de la OMS, en particular por los EE.UU., no es nuevo, ni tampoco es provocado por la crisis de COVID-19. Observamos, que la administración Trump ha estado haciendo comentarios negativos e injustificados sobre la OMS y otras agencias de la ONU que, según su criterio, no apoyan la política exterior de los EE.UU. En febrero 2020, la administración Trump, solicitó la reducción de la contribución de los EE.UU. a la OMS. La contribución de EE.UU. para este año es de 400 millones de dólares, lo que para los EE.UU. es una cantidad insignificante. Las cuotas de los Estados Unidos están actualmente atrasadas en unos 200 millones de dólares.
Esto es en parte la razón por la cual la OMS está crónicamente desfinanciada. El presupuesto de la OMS para los dos años 2020-21 es de unos 4.840 millones de dólares, lo que se aproxima al presupuesto anual de un gran hospital estadounidense y unos 2.000 millones de dólares menos que el presupuesto anual de los Centros de Control de Enfermedades de los Estados Unidos y, sin embargo, tiene un mandato clave en la salud global.
También cabe señalar que, en respuesta al llamamiento de emergencia para el coronavirus de la OMS, mientras que Japón ha donado 47,5 millones de dólares, Kuwait 40 millones de dólares, la Comisión Europea 33 millones de dólares y China y el Reino Unido unos 20 millones de dólares cada uno, los Estados Unidos ha donado menos de 15 millones de dólares.
Debilitamiento sistemático de la OMS: Viejas tácticas de los Estados Unidos y el neoliberalismo
Debe tenerse en cuenta que se ha producido un debilitamiento sistemático de la OMS como autoridad sanitaria global debido a las restricciones de financiación y las redefiniciones políticas de su función. Hasta principios del decenio de 1980, la mayor parte del presupuesto de la OMS procedía de las cuotas, que son cantidades fijas que los Estados miembros deben pagar en función de sus ingresos y del tamaño de su población. En 1983, con el auge del neoliberalismo y como expresión de su oposición tanto a la Declaración de Salud para Todos como a la Lista de Medicamentos Esenciales, los Estados Unidos votaron a favor de la congelación de las cuotas de la OMS.
También es cierto que la contribución de otros países a la OMS no ha aumentado a la luz de su creciente riqueza. Por ejemplo, la cuota de China representa menos del 1% de la financiación de la OMS debido a un prorrateo anticuado.
En consecuencia, a lo largo de los años, la composición del presupuesto de la OMS ha pasado a ser de contribuciones voluntarias, gran parte de las cuales están vinculadas a programas específicos, lo que reduce la flexibilidad en la utilización de esos fondos. En los últimos años, más de dos tercios de la financiación de los Estados Unidos a la OMS ha estado vinculada a proyectos específicos que pasan por alto los procesos de establecimiento de prioridades de la organización. Muchas de esas contribuciones proceden ahora de empresas filantrópicas, en particular de la Fundación Bill y Melinda Gates (BMGF). Las contribuciones voluntarias forman parte de acuerdos bilaterales: la mayoría de ellas promueven soluciones verticales tecnocráticas y no se dedican a fortalecer la salud pública y los enfoques de todo el sistema, sino que los marginan. La dependencia en las contribuciones de donantes compromete sustancialmente la independencia y la integridad de la OMS como autoridad sanitaria internacional y debilita su mandato de proteger y promover la salud global.
Los Estados Unidos también tienen un historial de duras negociaciones para diluir muchas resoluciones y tratados claves y, finalmente, se han negado a firmar varios de ellos. Han tratado regularmente de diluir las disposiciones sobre los derechos de salud sexual y reproductiva. Han sido grandes promotores de una presencia corporativa en los órganos de decisión de la OMS. Los Estados Unidos también ha apoyado nuevas instituciones de salud global vinculadas a empresas transnacionales que financian a la OMS para proyectos específicos y han debilitado el liderazgo global de la OMS. Esto ya ha debilitado la voz y la eficacia de la OMS en un amplio número de cuestiones. Todo esto ocurre en un momento en que la OMS se enfrenta a complejos desafíos a escala global debido a las amenazas de las enfermedades infecciosas, las enfermedades no transmisibles, la resistencia a los antimicrobianos, los determinantes sociales y comerciales subyacentes de esas enfermedades y el cambio climático.
EL MSP ha sido crítico, a través de su iniciativa WHO Watch y de su publicación Global Health Watch, con la infiltración corporativa de la OMS. Nuestra crítica proviene en gran parte de la posición en la que se encuentra la OMS debido a la falta de financiación y a las otras formas en que los EE.UU. fomentaron su debilitamiento.
También observamos que la administración Trump de los EE.UU. ha trabajado para socavar las agencias de la ONU en general.
El camino a seguir
El Movimiento para la Salud de los Pueblos, sus organizaciones asociadas y sus afiliados condenan el comportamiento autocrático y arrogante de la administración Trump de los Estados Unidos contra la OMS en el momento en que más se necesita. Nuestra esperanza es que los Estados Miembros se movilicen para fortalecer la OMS, y presionar al gobierno de los EE.UU. para redefinir su enfoque hacia esta agencia de la ONU. Reconocemos que existen debilidades organizativas en la OMS que deben ser abordadas a largo plazo para que se mantenga libre de intereses corporativos y comerciales y sea capaz de dar un asesoramiento gratuito y transparente a los países. Ha llegado el momento de aumentar el apoyo financiero a la OMS y de equiparla y fortalecerla para que se convierta en un organismo intergubernamental fuerte y democrático que conserve su autonomía profesional y política y que pueda cumplir eficazmente su mandato constitucional.
La mayoría de los Estados Miembros de la OMS necesitan una corriente continua de asesoramiento y orientación técnica y muchos países de bajos ingresos dependen de la OMS para el suministro de productos médicos para combatir COVID-19. Instamos a la comunidad mundial de salud pública a que respalde a la OMS como la autoridad más importante para dirigir y coordinar de la respuesta internacional frente a la pandemia de COVID-19.
Emitido por Consejo directivo, People’s Health Movement


